A medida que las condiciones de libertad de expresión y en general, de libertades civiles y los derechos humanos, tácita o implícitamente se ven cercados, violados y amordazados, se hace necesario alzar la voz y decir en público, a voces, a todo el mundo y sin temor que nuestro corazón está a la izquierda. Que creemos y luchamos por un mundo diferente a este que nos impone la sociedad de consumo y patriarcal en la que habitamos. Ser de izquierda, socialista, marxista leninista, maoísta, trotskista, etc, no te hace ser terrorista. Así que desde esta tribuna, desde tus redes sociales y todos los escenarios en los que se tenga la posibilidad de decir que no se está, que no estamos de acuerdo con las políticas públicas de un gobierno y en general, de un estado que no beneficien a la mayoría de los ciudadanos, sino a una minoría, propietaria de todos los medios de producción, lo haré, es más debemos hacerlo. Con el avance de los diálogos de paz en La Habana, aumentará la...
Contar las historias de lo que veo, escucho y siento de este mundo que he observado desde pequeña, fascinada, anhelando vivirlo todo. Una mirada desde esta experiencia humana que me permite ser, a la inmensidad de la vida que me queda por descubrir y redescubrir.